Fácil

Por supuesto pensaste que sería fácil. Sí, una maleta tras otra y arrancar dejándolo todo atrás. Pensaste que sería maravilloso enfrentarte a lo diferente después de haber estado atrapada en lo mismo por años. Las mismas personas, la misma comida, el mismo ambiente, en fin lo mismo en todo. Sin embargo, no lo hacías por ti lo hacías por alguien más. Cristian siempre me dijo que viajar te hacía ms fuerte y más hábil, sobre todo si vas a un lugar en el que no conoces el idioma y no lo puedes ni adivinar, como por ejemplo: China. Un lugar que para nosotros todos los mortales o al menos occidentales nos parece exótico y excitante, pero que en realidad es un lugar donde te perderías con sólo cruzar la calle.

Cristian con quien siempre quise hacer este y mil viajes más ya no está. No por decisión propia sino por decisión del universo ¿y yo? Yo sí estoy, estoy lejos muy lejos de donde inicié todo este plan además cansada de escuchar a todos decir: "-debes ir a India o a Indonesia, allá encontraras tu yo-" Lo expresan como un ser superior que quizás se parece al Dalai Lama o Gandhi, nunca lo sabré porque nunca encontré al tal ser superior y no, tampoco me encontré. Lo que encontré fue un montón de recuerdos arrumados y sentimientos sin descubrir, encontré el miedo, la aventura y la enfermedad. Nada peor que la enfermedad en un lugar como Asia o cualquier ciudad en la cual no hablen tu idioma y tú no hables el suyo. Me pasó y era un lugar en el que todos decían hablar inglés, pero resultaban dibujando lo que querían decir. De verdad, cómo no querer gritarle al doctor:"¡me siento mal ayúdeme!" y que ojalá en su rostro se dibujara un por fin te entiendo, lo cuál nunca pasó, pero afortunadamente me recuperé.

Me llamo Valentina y fracasé en ese viaje que llaman "conoce a tu yo interior", fracasé con la meditación, fracasé queriendo dejar ir, fracasé queriendo dejar de pensar en él. Lo tengo que aceptar fracasé muchas veces, pero nunca me rendí y creo que ahí está la clave, en no rendirse. No importa cuantas veces sea necesario intentarlo y no de resultado, quizá entre más lo intentes más cosas nuevas te atreves a internar y en ocasiones más te atreves a vivir y sobre todo aprendes más. Quizá no sea la mejor con aquello del desprendimiento, pero al menos ya no me da miedo la palabra fracaso, ni la palabra tiempo, quizás todavía me da miedo la palabra ausencia y la palabra amor, de todas formas todo es un proceso y la frase "todo a su tiempo" no es dicha en vano.